Valle del Guadalhorce "La huerta de Málaga"
El pasado fin de semana, un grupo de periodistas, gente influyente del mundo de la gastronomía y blogueros, fuimos invitados por el Valle del Guadalhorce para darnos a conocer la variedad de recursos tanto naturales como agrarios de la zona, haciendo hincapié en las huertas ecológicas y en los campos de cítricos, y en esas pequeñas y medianas empresas que hacen que el día a día del Valle esté en constante crecimiento.
Como el mundo de la escritura para mí está negado, quiero transmitiros con imágenes todo lo vivido, que ha sido mucho y muy bueno.
El problema está en resumir dos días, no quiero extenderme mucho para no cansaros, pero me es imposible reducirlo más, espero que lleguéis al final y si consigo transmitiros aunque sea pequeña, parte lo aprendido y vivido, me daré por satisfecha.
Ya desde el autobús, va apareciendo el bellísimo paisaje del Valle, se nota que ha llovido, el verde es espectacular, aunque adentrándonos más, hemos podido ver los destrozos provocados por las últimas inundaciones.
Empieza la jornada en Coín, en la Cafetería Alameda con un buen desayuno, pan, aceite y cítricos de la tierra, sin olvidarnos de esa exquisita manteca colorá que nos ha acompañado en nuestros desayunos, después de las presentaciones y charla nos ponemos en camino.
Primera visita del día, al molino tradicional de harinas ecológicas de Coín, una empresa familiar que ha ido superando el día a día desde 1780, José Antonio propietario del molino y Margarita Jiménez Gómez, del área agroalimentaria , nos explicaron el funcionamiento y la historia del molino, donde solo se muele cereal ecológico, José Antonio nos dio unas clase magistral sobre las diferentes harinas ecológicas.
Y después de ver y tocar las maravillosas harinas, nos vamos a la panadería La Curruca, otra empresa familiar, donde el pan se hace a mano desde el sigo XIX, con una masa madre de gran solera, generaciones han pasado por ella cuidándola con mimo para mantenerla viva y fresca y producir con ellas esos magníficos panes que Santi y Miguel saben hacer como nadie.
Especial mención a ese horno de leña del siglo XVIII, alimentado con ramas de olivo y tomillo, y que día a día pasan cientos de panes elaborados de la manera más artesanal posible, aquí no intervienen máquinas, solo los puños y el cariño que le ponen, si visitáis Coín no dejar de comprar pan, de un solo bocao os devolverá a la niñez.
De nuevo al autobús, ahora toca ver y aprender del cultivo ecológico, y que en Huertas Viejas de Coín, la familia Hevilla cuidan con mimo y esmero.
Allí aprendimos la importancia que tiene el cultivo ecológico y la repercusión en nuestra salud, la lucha diaria de familias enteras por conservar y recuperar viejas semillas, como se conserva el método tradicional de regadío, las acequias siguen funcionando y da la sensación que el avance del tiempo se ha parado, se respira un aire limpio mezclado con los olores de la huerta, o mejor como ellos dicen de la "selva", entre frutas, hortalizas y barro, mucho barro como consecuencia de las últimas lluvias, se nos hizo de noche y empezó a hacer frío, nos fuimos con la sensación que hay mucha gente que trabaja y disfruta por preservar el cultivo tradicional ecológico, aunque como bien dicen, solo de la huerta no se puede vivir.
Con barro hasta los tobillos, nos subimos al autobús, y visitamos la Cooperativa Guadalhorce Ecológico en Villafranco del Guadalhorce, allí un gran número de agricultores trabajan sus campos , el auge de esto debido a la crisis y al paro, los agricultores que abandonaron sus huertos para trabajar en otros sectores, están volviendo y eso hace que cada día pequeños agricultores se una a la cooperativa, y desde allí planifican los cultivos para luego surtir los pedidos que semanalmente reparten por toda la ciudad, y cada fin de semana montan mercadillos en Málaga y la provincia. un lujo que tenemos a nuestro alcance a golpe de teléfono o internet, y que gracias a esta herramienta podéis recibir una caja de fruta y verdura frescas y ecológica en cualquier punto de España.
MÁS INFORMACIÓN
Teléfono para los pedido 952243149 672281676
eco@guadalhorceecologico.es
www.guadalhorceecologico.es/gp
Si quereis visitar la tienda
Guadalhorce Ecológico, CA
Ronda de Poniente, s/n
29670 Alhaurín el Grande (Málaga)
horario de lunes a jueves 09.00 a 14.00 y de 16.00 a 19-00, viernes de 09.00 a 14.00
Con la noche echada encima, nos dirigimos a La Venta Los Conejitos, "como han cambiado las ventas" nos recibío y nos acompañó en la cena Cristobal Martín uno de los propietarios, disfrutamos de la excelente comida y de su compañía, nos enseñó la haciendo cuidada al máximo detalle, grandes jardines, salones para congresos y festivales..... y nos contó sus proyectos para el futuro, que espero los haga realidad.
Y por fin, llegada y fonda, era tan tarde que no se podía apreciar la belleza del entorno, además deseando una ducha y meternos en la cama, que nos esperaba otro día intenso.
Nos despertamos con una mañana fría y gris, pero con unas vistas al pantano increíblemente bonitas, empieza bien el día, bajamos y nos encontramos una mesa preparada para el desayuno, y que desayuno pensado para reponer fuerzas, y luego una breve visita al entorno, un lugar privilegiado donde poder descansar y relajarse y olvidarse del ajetreo diario, donde el tren llega a las mismas puertas del hotel, donde el único ruido es el del agua y los pájaros, ideal para senderismo, excursiones en bicicleta, para una velada romántica, para ir con toda la familia y disfrutar del paisaje, de la buena comida y del trato exquisito del personal, gracias Queco por todas las atenciones recibidas.
Subimos al autobús donde Andrés el conductor no ha llevado a todos sitios siempre sonriendo y amable, a pesar de dejarle el autobús lleno de barro y algún que otro accidente con las compras, y visitamos Álora, el Mirador del Castillo, sus empinadas calles, su monumento a la Faenera, a ese día a día invisible de la mujer rural , el azulejo dedicado a Los Meceros, una alegoría de como se ligaba hace un par de generaciones en Álora, "como ha cambiado, ahora móvil en mano y como si nos conociéramos de toda la vida"
Después del bonito paseo por Álora fuimos a la Cooperativa Manzanilla Aloreña, Paco el gerente nos explico todo el proceso desde que se coge la aceituna del olivo, hasta que llega al consumidor, como aceituna de mesa o como aceite de oliva virgen extra, y extra ecológico, nos enseñó que la aloreña es una aceituna de piel delicada, con un hueso flotante y que su recogida tiene que ser manual, la técnica del ordeño, cogiendo una a una y depositándola en cestos que los propios aceituneros llevas cogidos al cuerpo, de esa forma la aceituna llega perfecta a la fábrica, allí se lava y se mete en bocoyes para su maduración,
Las características organolépticas varían dependiendo del grado de maduración natural de la aceituna, las menos fermentadas son las conocidas como, aceituna verde fresca , conserva el color verde claro que tiene en el árbol, con olor a fruta verde y a hierba, con una textura firme y crujiente y el amargor es la nota característica.
Con algo más de maduración encontramos la aceituna tradicional, su color verde-amarillo-pajizo , por su grado de maduración no se percibe los aromas a frutas fresca, una textura menos firme pero que conserva sus propiedades crujiente y ligeramente amargo.
Y por último la aceituna curada, con un color amarillo-marrón, menos firme y crujiente que las dos anteriores, con sabor ácido y pierde su amargor.
Para mi que estoy acostumbrada desde niña a comer aceitunas casi recién cogida del árbol, prefiero la variedad verde fresca, pero la mayoría del grupo prefirió la aceituna tradicional.
Con la aceituna que no tiene el calibre para que sea aceituna de mesa, se hace el aceite, un aceite dulzón con afrutado intenso a almendra y hierba fresca verde, su elaboración de primera prensada en semi frío con molino ecológico en dos fases, no pica en exceso y no se repite al hacer la digestión, no resulta pesado ni se agarra, excelente para cocinar crece y no humea e inmejorable en crudo para ensaladas y para el desayuno, por algo la aloreña es "la pata negra de las aceitunas".
Después de disfrutar de las aceitunas, nos vamos a los cítricos, en la Finca del Condado nos espera Carlos "el músico", acompañado de Rafael, un octogenario que derrocha sabiduría, veteranía y gran humor, para enseñarlos y degustar las variedades citrícolas que tienen, naranja, limones, mandarinas o como los lugareños la llaman "mondarina", pomelo rojo, limón dulce todo un descubrimiento, y lima, una delicia pasear entre naranjos, oliendo a azahar y degustando las frutas recién cogidas del árbol, impagable.
Y nos toca reponer fuerzas, esta vez en el Cortijo del Arte en Pizarra, nos recibió y atendió muy amablemente la propietaria Inge De Ceuleneer, el cortijo eran una antigua vaquería transformada en hotel y restaurante, donde predomina la madera y su peculiaridad está en las habitaciones, cada una de ellas lleva el nombre de un personaje famoso, Antonio Banderas, Antonio Gala, Sergio Ramos........, allí pudimos degustar la sopa aplastá típica de Pizarra, muy parecida a las sopas perotas, de Álora, o a la sopa poncima de Alhaurín.Como el mundo de la escritura para mí está negado, quiero transmitiros con imágenes todo lo vivido, que ha sido mucho y muy bueno.
El problema está en resumir dos días, no quiero extenderme mucho para no cansaros, pero me es imposible reducirlo más, espero que lleguéis al final y si consigo transmitiros aunque sea pequeña, parte lo aprendido y vivido, me daré por satisfecha.
Ya desde el autobús, va apareciendo el bellísimo paisaje del Valle, se nota que ha llovido, el verde es espectacular, aunque adentrándonos más, hemos podido ver los destrozos provocados por las últimas inundaciones.
Empieza la jornada en Coín, en la Cafetería Alameda con un buen desayuno, pan, aceite y cítricos de la tierra, sin olvidarnos de esa exquisita manteca colorá que nos ha acompañado en nuestros desayunos, después de las presentaciones y charla nos ponemos en camino.
Primera visita del día, al molino tradicional de harinas ecológicas de Coín, una empresa familiar que ha ido superando el día a día desde 1780, José Antonio propietario del molino y Margarita Jiménez Gómez, del área agroalimentaria , nos explicaron el funcionamiento y la historia del molino, donde solo se muele cereal ecológico, José Antonio nos dio unas clase magistral sobre las diferentes harinas ecológicas.
Y después de ver y tocar las maravillosas harinas, nos vamos a la panadería La Curruca, otra empresa familiar, donde el pan se hace a mano desde el sigo XIX, con una masa madre de gran solera, generaciones han pasado por ella cuidándola con mimo para mantenerla viva y fresca y producir con ellas esos magníficos panes que Santi y Miguel saben hacer como nadie.
Especial mención a ese horno de leña del siglo XVIII, alimentado con ramas de olivo y tomillo, y que día a día pasan cientos de panes elaborados de la manera más artesanal posible, aquí no intervienen máquinas, solo los puños y el cariño que le ponen, si visitáis Coín no dejar de comprar pan, de un solo bocao os devolverá a la niñez.
La Curruca una panadería con historia, tanta que es la panadería más antigua de Málaga.
Y después de tanta visita y tanta información y tanto aprender, nos esperan en un restaurante de la localidad, Casa Paco de Coín, donde los hermanos Cerrillos nos reciben con cariño, y nos deleitan con sus creaciones culinarias, excelente el trato y la comida, y para mí y creo que ahí compartimos todos la misma opinión, espectacular la presa Ibérica a la sal de carbón. De nuevo al autobús, ahora toca ver y aprender del cultivo ecológico, y que en Huertas Viejas de Coín, la familia Hevilla cuidan con mimo y esmero.
Allí aprendimos la importancia que tiene el cultivo ecológico y la repercusión en nuestra salud, la lucha diaria de familias enteras por conservar y recuperar viejas semillas, como se conserva el método tradicional de regadío, las acequias siguen funcionando y da la sensación que el avance del tiempo se ha parado, se respira un aire limpio mezclado con los olores de la huerta, o mejor como ellos dicen de la "selva", entre frutas, hortalizas y barro, mucho barro como consecuencia de las últimas lluvias, se nos hizo de noche y empezó a hacer frío, nos fuimos con la sensación que hay mucha gente que trabaja y disfruta por preservar el cultivo tradicional ecológico, aunque como bien dicen, solo de la huerta no se puede vivir.
Con barro hasta los tobillos, nos subimos al autobús, y visitamos la Cooperativa Guadalhorce Ecológico en Villafranco del Guadalhorce, allí un gran número de agricultores trabajan sus campos , el auge de esto debido a la crisis y al paro, los agricultores que abandonaron sus huertos para trabajar en otros sectores, están volviendo y eso hace que cada día pequeños agricultores se una a la cooperativa, y desde allí planifican los cultivos para luego surtir los pedidos que semanalmente reparten por toda la ciudad, y cada fin de semana montan mercadillos en Málaga y la provincia. un lujo que tenemos a nuestro alcance a golpe de teléfono o internet, y que gracias a esta herramienta podéis recibir una caja de fruta y verdura frescas y ecológica en cualquier punto de España.
MÁS INFORMACIÓN
Teléfono para los pedido 952243149 672281676
eco@guadalhorceecologico.es
www.guadalhorceecologico.es/gp
Si quereis visitar la tienda
Guadalhorce Ecológico, CA
Ronda de Poniente, s/n
29670 Alhaurín el Grande (Málaga)
horario de lunes a jueves 09.00 a 14.00 y de 16.00 a 19-00, viernes de 09.00 a 14.00
Con la noche echada encima, nos dirigimos a La Venta Los Conejitos, "como han cambiado las ventas" nos recibío y nos acompañó en la cena Cristobal Martín uno de los propietarios, disfrutamos de la excelente comida y de su compañía, nos enseñó la haciendo cuidada al máximo detalle, grandes jardines, salones para congresos y festivales..... y nos contó sus proyectos para el futuro, que espero los haga realidad.
Y por fin, llegada y fonda, era tan tarde que no se podía apreciar la belleza del entorno, además deseando una ducha y meternos en la cama, que nos esperaba otro día intenso.
Nos despertamos con una mañana fría y gris, pero con unas vistas al pantano increíblemente bonitas, empieza bien el día, bajamos y nos encontramos una mesa preparada para el desayuno, y que desayuno pensado para reponer fuerzas, y luego una breve visita al entorno, un lugar privilegiado donde poder descansar y relajarse y olvidarse del ajetreo diario, donde el tren llega a las mismas puertas del hotel, donde el único ruido es el del agua y los pájaros, ideal para senderismo, excursiones en bicicleta, para una velada romántica, para ir con toda la familia y disfrutar del paisaje, de la buena comida y del trato exquisito del personal, gracias Queco por todas las atenciones recibidas.
Subimos al autobús donde Andrés el conductor no ha llevado a todos sitios siempre sonriendo y amable, a pesar de dejarle el autobús lleno de barro y algún que otro accidente con las compras, y visitamos Álora, el Mirador del Castillo, sus empinadas calles, su monumento a la Faenera, a ese día a día invisible de la mujer rural , el azulejo dedicado a Los Meceros, una alegoría de como se ligaba hace un par de generaciones en Álora, "como ha cambiado, ahora móvil en mano y como si nos conociéramos de toda la vida"
Después del bonito paseo por Álora fuimos a la Cooperativa Manzanilla Aloreña, Paco el gerente nos explico todo el proceso desde que se coge la aceituna del olivo, hasta que llega al consumidor, como aceituna de mesa o como aceite de oliva virgen extra, y extra ecológico, nos enseñó que la aloreña es una aceituna de piel delicada, con un hueso flotante y que su recogida tiene que ser manual, la técnica del ordeño, cogiendo una a una y depositándola en cestos que los propios aceituneros llevas cogidos al cuerpo, de esa forma la aceituna llega perfecta a la fábrica, allí se lava y se mete en bocoyes para su maduración,
Las características organolépticas varían dependiendo del grado de maduración natural de la aceituna, las menos fermentadas son las conocidas como, aceituna verde fresca , conserva el color verde claro que tiene en el árbol, con olor a fruta verde y a hierba, con una textura firme y crujiente y el amargor es la nota característica.
Con algo más de maduración encontramos la aceituna tradicional, su color verde-amarillo-pajizo , por su grado de maduración no se percibe los aromas a frutas fresca, una textura menos firme pero que conserva sus propiedades crujiente y ligeramente amargo.
Y por último la aceituna curada, con un color amarillo-marrón, menos firme y crujiente que las dos anteriores, con sabor ácido y pierde su amargor.
Para mi que estoy acostumbrada desde niña a comer aceitunas casi recién cogida del árbol, prefiero la variedad verde fresca, pero la mayoría del grupo prefirió la aceituna tradicional.
Con la aceituna que no tiene el calibre para que sea aceituna de mesa, se hace el aceite, un aceite dulzón con afrutado intenso a almendra y hierba fresca verde, su elaboración de primera prensada en semi frío con molino ecológico en dos fases, no pica en exceso y no se repite al hacer la digestión, no resulta pesado ni se agarra, excelente para cocinar crece y no humea e inmejorable en crudo para ensaladas y para el desayuno, por algo la aloreña es "la pata negra de las aceitunas".
Después de disfrutar de las aceitunas, nos vamos a los cítricos, en la Finca del Condado nos espera Carlos "el músico", acompañado de Rafael, un octogenario que derrocha sabiduría, veteranía y gran humor, para enseñarlos y degustar las variedades citrícolas que tienen, naranja, limones, mandarinas o como los lugareños la llaman "mondarina", pomelo rojo, limón dulce todo un descubrimiento, y lima, una delicia pasear entre naranjos, oliendo a azahar y degustando las frutas recién cogidas del árbol, impagable.
Y hasta aquí hemos llegado, cansados pero llenos de alegría por lo vivido y aprendido, por la gente tan fantástica que hemos conocido gracias a Valle del Guadalhorce que lo ha hecho posible, y en su nombre a Toñi Gallego Gallego, María Trujillo Zambrana y a Marga Jiménez Gómez, que nos han acompañado, informado, guiado, alegrado y hasta cuidado. Gracias a todos y espero volver a encontraros.
Me ha encantado, Reme, transmite muy bien lo que hemos vivido, ¡y qué cantidad de fotos tan bonitas,tienes muy buen ojo! Bsts
ResponderEliminarLo hemos pasado bien, además hemos aprendido mucho que se irá reflejando en nuestro dia a dia y que intentaremos transmitirlas.
EliminarBesitosss guapisima
me alegro que te guste, se que es larrrga pero era inevitable, son tantas cosas que merecen la pena ser contadas.
ResponderEliminarBsitossss
Qué pedazo de resumen!!!!! Creo que el mío va a consistir en un enlace al tuyo... Acabo de publicar lo de Almería... llevo un retraso!!
ResponderEliminarMe ha encantado recordar todo lo que hemos hecho este fin de semana, qué divertido!!
Un abrazo, Begoña
Demasiado largo lo sé pero no he conseguido reducir lo más, seleccionando fotos me lo he pasado genial, volviendo a recordar los detalles, que han sido muchos y muy divertidos.
ResponderEliminarBesitossss
Qué intenso!! vaya bien que lo habeis pasado, me ha gustado mucho leerlo. Besitos!
ResponderEliminarQué maravilla, nos has llevado de excursión ofreciéndonos lugares maravillosos y unos manjares riquíiiiiiiisimos, pero lo mejor de todo ha sido la compañía. Muchísimas gracias, una entrada buenísima, enhorabuena. Un fuerte abrazo desde el blog de la Tertulia Cofrade Cruz Arbórea.
ResponderEliminarhttp://tertuliacofradecruzarborea.blogspot.com/